Materia: Es cualquier porción del universo que posee masa y volumen, es decir, que ocupa un espacio. El aire que respiramos, el agua, los minerales, las plantas y todos los objetos que vemos a nuestro alrededor son ejemplos de materia. En cambio, la luz, la inteligencia y la belleza no son materia porque no ocupan un espacio, no tienen volumen.

Sustancia: Son los distintos tipos de materia que constituyen los cuerpos. Por ejemplo, un clavo (cuerpo) está constituido por hierro (sustancia)

Átomo: es la menor porción de materia capaz de combinarse para formar moléculas. Es la unidad más pequeña de un elemento químico que mantiene su identidad o sus propiedades. Está constituido por partículas subatómicas llamadas protones (con carga positiva y masa), electrones (con carga negativa y masa despreciable) y por neutrones (sin carga, pero con masa). Los átomos rara vez se encuentran libres y aislados en la naturaleza como ocurre en algunos “gases nobles o inertes” (helio, neón, argón, etc.). Lo más frecuente es que los átomos tiendan a unirse unos con otros, ya sean iguales o diferentes, para formar partículas más estables: las moléculas.

Molécula: es la menor partícula de una sustancia, formada por átomos combinados en proporción definida y constante, que puede existir libre y presenta todas las propiedades de dicha sustancia. Puede estar formada por uno, dos o más átomos. Por ejemplo: H2O (agua), O2 (oxígeno); etc.

Elemento Químico: Un elemento químico es una sustancia simple, que no se puede descomponer por métodos físicos ni químicos en otras más sencillas. Cada elemento químico posee. un átomo característico, con una cantidad definida de protones, neutrones y electrones.